martes, 28 de noviembre de 2017

Quercus suber

 Cerca de casa tenemos un sendero que cruza un bosque, es nuestro lugar habitual de paseos. Siempre pasamos al lado de un alcornoque (Quercus suber) es un hermoso ejemplar al que he fotografiado varias veces. Los últimos incendios lo han dañado considerablemente, espero que logre recuperarse.
La corteza, la capa más externa del tronco del alcornoque, tiene una función protectora y puede ser muy gruesa. El corcho protege la parte interna incluso del fuego. En un alcornoque recién descorchado podemos ver su tronco enrojecido, esta capa es el tejido vivo, enrojece como reacción de defensa al aire y la luz. Esta fina capa que envuelve la madera como un guante, se llama cámbium y crece cada año, produciendo madera hacia el interior del árbol y corteza hacia el exterior. 
Espero que este gigante que parecía invencible, pero sin embargo era vulnerable, se recupere y podamos seguir admirándolo durante nuestros paseos.  

 El alcornoque antes de que la sin razón de los incendiarios lo quemara... 
Testigo de nuestros paseos, siempre nos detenemos para admirarlo.

 En esta imagen se puede apreciar la parte viva del tronco de un alcornoque.

 Tristeza y desolación son las palabras adecuadas.

 Espero que su corteza le haya servido de escudo protector y vuelva a ser el bello árbol que era...

martes, 21 de noviembre de 2017

Shinrin - Yoku

Hace años que en las consultas sanitarias en Japón se prescriben las terapias de bosque llamadas Shinrin - Yoku. 
Una medida preventiva más, junto a una dieta saludable y ejercicio físico. Los japoneses tienen itinerarios terapéuticos en los bosques.
Las sesiones se hacen de forma pausada y relajada, con los cinco sentidos en el ambiente del bosque, prestando atención a lo que sucede: un pájaro que trina, el sonido de un arroyo, disfrutando con la vista de los colores y formas de las copas de los árboles, palpando la textura de un tronco o deslizando una mano sobre el húmedo musgo...
Los humanos hemos evolucionado en la naturaleza, es en el bosque donde nos encontramos más tranquilos.
Tenemos que cuidar y conservar nuestros bosques, visitarlos beneficia nuestra salud. 


 Terapia de bosque es sinónimo de salud.

Al contemplar estos paisajes recuperamos la tranquilidad.

 El agua ayuda en la relajación.

 El otoño es una época perfecta para pasear por nuestros bosques.

 El ser humano tendría que valorar esta belleza antes de encender una cerrilla... desafortunadamente no lo hace.
 Protejamos los bosques con toda la fuerza que esté a nuestro alcance.

miércoles, 15 de noviembre de 2017

Notre- Dame

                             Recordando París - 2

La grandiosa  catedral de estilo gótico está dedicada a María la madre de Jesús. Se encuentra situada en la pequeña Isla de la Cité, rodeada por las aguas del Sena.
Durante la Revolución francesa parte de la catedral fue destruida y muchos de sus tesoros robados. En 1804 Napoleón Bonaparte se corona a sí mismo emperador en la catedral.
Victor Hugo escribió Nuestra Señora de París, la historia de Quasimodo, el campanero que debido a su aspecto deforme no salía de la catedral "Él nunca soñó que había otros setos que las vidrieras en continua floración, otras montañas que las torres de la iglesia, u otros océanos que París rugiendo bajo sus pies." 

Me sorprendió la estrechez y la altura en su interior,  la belleza de sus vidrieras y por supuesto los 387 escalones en forma de caracol que conducen a la galería de las quimeras o gárgolas en la cima de la catedral. Los diablos vigilan París y desde esta altura las vistas de la Ciudad de la Luz son maravillosas. Compensan las largas colas y el esfuerzo que supone subir a esa altura (especialmente para los que padecemos vértigo) pero una vez arriba, la belleza y la admiración ocupan el lugar del pánico en el hemisferio cerebral.  
París y sus maravillosos monumentos siempre quedaran en mi memoria.
El río Sena rodea la catedral y parece querer protegerla.

Belleza en forma de catedral.
 La altura es impresionante.
 Hermosas vidrieras.

 En diciembre había una corona navideña.

 Las quimeras parecen pensativas...

 Hermosas vistas de la ciudad bañada por el Sena.

 La torre desde las alturas.

 Maravillosa ciudad.
 Una visita inolvidable.

jueves, 9 de noviembre de 2017

Musée du Louvre

                                       Recordando París - 1

Las largas colas bajo un frío parisino nos permiten admirar la pirámide de cristal que sirve de acceso al museo. Fue construida en 1986 y contrasta con la monotonía de la piedra del grandioso edificio. El museo está ubicado en el antiguo Palacio real del Louvre. Tras el traslado de la residencia real al Palacio de Versalles el edificio de 160.000 metros cuadrados se transforma en uno de los museos más impresionantes del mundo. El coleccionismo desarrollado por la monarquía francesa a lo largo de siglos y las expoliaciones realizadas durante el imperio napoleónico forman uno de los grandes museos nacionales, que fue modelo para muchos de los museos del mundo. Hoy es uno de los más visitados.
Cuando entramos, la emoción me produce un nudo en la garganta... los controles en el interior me devuelven a la realidad, son necesarios después de los atentados terroristas. Ya dentro de las salas vuelvo a sentir esa emoción que se respira al estar rodeados de tanta maravilla reunida. El museo es enorme, se podrían pasar varios días recorriendo sus salas. Para ver las obras más destacadas es necesario una mañana completa.
Estos días se cumple un año de la visita al museo y la emoción sigue en el recuerdo y la retina.

 Grandioso edificio que alberga el museo.

 La pirámide acristalada es impresionante.

 La sala de las esculturas queda para la próxima visita.

El cuadro de la Gioconda de Leonardo da Vinci es admirado por millones de visitantes.
 Imagen bella  y enigmática...

 Lienzo de Andrea di Solario que representa a María lactante. Me invadió un sentimiento de ternura.
 No recuerdo los autores de estos cuadros. Si alguien los conoce agradezco la información. Me impresionó el realismo de la luz de la luna. 

 La sala de las joyas de la corona. Lujo y esplendor.

  Las estatuas del exterior parecen despedirnos hasta la próxima visita.