Las primeras y tímidas flores asoman sobre el manto de hojas que cubre el suelo. Las azaleas toleran bien las frías temperaturas que traen las madrugadas del intervalo entre el final del invierno y el comienzo de la primavera.
Las camelias nos alegran la vista con su abundancia y variedad de colores.
A diferencia del apogéo del jardín lleno de flores en plena primavera y verano, las primeras notas de color de las plantas que anuncian la llegada de belleza completa en la naturaleza, nos permiten ir deleitando los sentidos poco a poco.
Las camelias son las primeras que anuncian la inminente llegada de la primavera.
Narcisos y prímulas asoman entre las hojas secas del suelo.
Los cítricos también dan la nota de color en el jadín al final del invierno.
La belleza del jacinto es solo superado por su aroma.
Las caléndulas permanecen todo el invierno dando color a huertos y jardines.
Los insectos polinizadores son básicos en la dispersión de tanta belleza.