Homenaje a mi perro, Astro

Me permito utilizar mi blog como un último homenaje a mi querido perro Astro. Todos los amantes de los animales me entenderán.
Él disfrutaba tanto de la naturaleza como yo. Cuando era joven le encantaba correr entre las hojas secas en otoño, era feliz dando volteretas por el suelo alfombrado de hojas.
Su vida está ligada a momentos felices de mi vida. Desde que era un cachorrito cuando lo encontramos abandonado. Nos correspondió con creces, siendo el perro más bondadoso, fiel y generoso que nadie pueda tener. Siempre aceptando con cariño a todos los demás perros que se fueron añadiendo. Tenemos otros perros y a todos los queremos, pero ninguno llegará a la nobleza de nuestro fiel Astro.
Con razón dicen que el perro es el único ser sobre la tierra, que te puede amar más que a sí mismo. Con Astro esto se cumplía al pie de la letra.
Nos dedicó por completo sus trece años de vida, con supremo amor, sin pedir nada a cambio. El último año se paralizó de sus patas traseras, le seguíamos sacando a sus paseos diarios con un arnés. Los últimos meses tenía incontinencia de orina, le dimos los cuidados y la dedicación, que sin duda alguna, se merecía.
Ayer empeoró su salud, tuvo un colapso de algún órgano... 
Vino el veterinario a casa y lo dormimos... El último acto de amor que tuvimos con él para que no sufriera.
Ahora somos nosotros los que sufrimos y lloramos su pérdida.
Confío en que esté correteando en algún lugar con muchas hojas secas...